Las estadísticas, además de tendenciosas, pueden ser bastante engañosas si no se enmarcan adecuadamente.
Las estadísticas cantan: una gran parte de las personas que se casan o inician una relación de convivencia, se separan.
Las estadísticas dan pistas, otra cosa es que les hagamos caso.
Las estadísticas son un muermo: la mayoría de los datos sobre frecuencias que realizan los seres humanos NO interesan a casi nadie salvo a aquellos que los han elaborado (y no siempre).
Ofrecer consejos no es otra cosa que informar sobre probabilidades.
Hay tres clases de mentiras: las mentiras, las grandes mentiras y las estadísticas.
Un estadístico podría meter su cabeza en un horno y sus pies en hielo, y decir que en promedio se encuentra bien.
La probabilidad de que los semáforos estén en rojo es directamente proporcional al apuro que llevamos.
De todas formas no parece buena idea estar tan pendientes de las estadísticas, podríamos dormir peor. Y he leído en un par de sitios que tanto la carencia como el exceso de sueño doblan las probabilidades de morir.
Un 50 % de los miembros de tu Curso de blog estamos deacuerdo en que el 50% restante no tiene muy claro si el 10 % sabe de lo que estamos hablando, je,je,je... Absolutly agree with you.
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